Las nuevas aportaciones son importantes, más no para sustituir lo anterior, sino matizarlo, actualizarlo, modernizarlo. Lo medular permanece porque corresponde a la esencia del hombre. En la medida en la que las técnicas modernas contribuyan a hacer más perfecto, más humano, más responsable, más productivo y más solidario… hay que integrarlas como elementos positivos en el proceso de formación del nuevo hombre, de la sociedad.Fieles al pensamiento de Marcelino Champagnat será válido propones los valores universales e inculcarlos en el corazón de un alumno para que tanto el individuo como la sociedad alcancen las metas de justicia, paz y libertad. Así mismo será siempre válido considerar el amor como el motor que impulsa toda acción educativa.La filosofía educativa tradicional y las propuestas modernas, no están reñidas entre sí, ya que lo antiguo y lo nuevo, unidos constituyen la respuesta a las necesidades y los desafíos que nos plantean los niños y jóvenes de hoy. Educar responde siempre a una filosofía y su ejercicio es un arte. La filosofía que nosotros tenemos es la católica desde su mas ondas raíces que concibe el hombre en su más alta dignidad de ser Hijo de Dios.